Novedades. The Bones - Bournout Boulevard

Rock n’roll survivor lo vivo ,lo vivimos, como un frenético viaje en carretera. Al final del mismo nos espera el re/descubrimiento de una pieza que forma parte de ese puzzle complejo e interminable llamado rock’n’roll. Desde luego, el destino no siempre puede ser del gusto de todos, queridos lectores, pero es significativo al menos, el hecho de que en cualquier lugar puedes encontrar una banda, tu banda, que pasa a formar parte de tus juergas, de tus conversaciones y de ese set- list particular que cada uno de nosotros tenemos instalado en el cerebro y que no dejar de rodar y rodar en nuestros oídos…Desde hace semanas The Bones perturba la apacible vida de mis vecinos.
Agarrense los cinturones, porque nos dirigimos a toda velocidad hacia Karlskrona (Suecia) donde se encuentran unos tipos a los que mejor no hacerles esperar… Absténgase amantes del tedio porque The Bones hacen de su día a día, un continuo desmadre: Elvis, sudor, y cerveza mucha cerveza, “abre una birra y lleva siempre un par de cuernos en tu mano”, es el consejo que nos dan estos malditos vividores. Dicen que nacieron para patearle el culo al mundo y de paso en mi opinión a todos aquellos que afirman que ya no hay bandas con cojones. "Burnout Boulevard" su última entrega continua esa senda iniciada en su anterior disco "Straigt flush Gettto". El coktail: canciones de aceleradísimo minutaje, coros perfectos, riffs sin pretensiones, letras para corear puños en alto y la sombra alargadísima de sus queridos Ramones y de mis queridos 50. Un conglomerado como podeis ver de lo más ecléctico si le añadimos para más inri el legado de Social Distortion, que aún intentando desmarcase de odiosas comparaciones, sin lugar a dudas es indiscutible. Ok, no han inventado nada que no exista bajo el sol, pero su fuerte personalidad amén de sus once años de currela en la sombra, los está llevando, y con razón a lo más alto
“Burnout Boulevard” es un viaje en el que es recomendable no hacer paradas , desde “Mighty touchdown” hasta “Fit in my skin", es un continuo despilfarro de punk-rock de la vieja escuela donde sus dos cantantes Beef y Andy se enfrancan en un duelo a gritos entre colegas y dando como resultado que cada corte sea una nueva reyerta de bar de carretera y sin que por ello suene repetitivo. "She hates me (yeah,yeah,yeah)", "Flafline fever" "Fools vacation" "Black day boggie"...Escandinavia aún respira fuerte y lo hace a pleno pulmón a través de estos macarras suecos de los que tener por seguro van a dar mucho que hablar este 2008.

Aqui finaliza nuestro pequeño viaje, no sé ustedes, pero yo lo pienso culminar poniendo a rodar por enésima vez "Bournout Boulevard" mientras disfruto de mi cerveza más fría (acaso podía ser de otra manera?)